28.4.14

Mundanos

Mundano ser,
te convierto en mi dios.
Ante ti mi Señor,
hincada de rodillas cumplo mis penitencias
y te observo suplicante,
sollozando por los profundos pecados,
Tú me miras con desdén,
como a una mundana
y te regocijas por el perdón que me concedes.
Finalmente me bendices,
 y quedo tan impregnada de tu existencia,
 mi mundano ser...

1 comentario:

  1. Gracias, Evita, por dejar un comentario en mi blog, que me permite llegar hasta tu bellísimo rincón.

    Me ha gustado tu manera de transmitir poesía, me verás más veces por aquí.

    Un beso.

    ResponderEliminar