La expectativa tan vibrante por él se ha mantenido mientras duró, la ilusión y el deseo llenaron la fuente de mi inspiración y así acrecentaba mis esperanzas sobre él, una fuente que parecía inagotable. Lo he amado más al inicio, me pregunto si era más fácil así, y otra vez el autoengaño... claro que es más fácil porque soy adicta al amor platónico, pero siempre se estropea.
Tuve una visión de lo que ahora está ocurriéndome la misma noche en que se rompió el hechizo con nuestros besos apasionados, los que de a pocos se fueron haciendo vacíos, creo ésa que esa noche empezó a apagarse el encanto ...
intento saber si me faltaron fuerzas, si me rendí muy pronto o si no lo cuidé bien, si acaso se dejó mimar y no me percaté ... intenté hacerlo feliz porque eso me hacía feliz a mi también pero no fue suficiente, la única certeza es que de ése amor intenso, dulce y maravilloso ya casi nada queda, me queda la pasión generada por las ideas que ha sembrado en mi cabecita.
A pesar del gran placer que me generaba la nostalgia de estar sola luego de cada desenlace, sospecho que ésta historia con él no me dejará mucha melancolía y voy cayendo en cuenta que ya no tengo la misma avidez por perseguir a alguien que me mueva el piso... pues me resulta emocionalmente agotador y hasta ahora los resultados no fueron positivos. Tal vez el secreto está en lo que he intentado evitar, quedarme quieta, ser pasiva, permitir que se me acerque y solo dejarme llevar, aunque esto suene aburrido.
Finalmente terminaré dándolte la razón a lo que me pareció tirado de los pelos, que en el amor es mejor elegir al que está enamorado de uno antes de perseguir al que uno ama.. y así se acabará también el ciclo del blog, de éste refugio que me ha servido para expresar mis moods.
